Mateo recoge en la calle una caja de cartón: es ideal para su último
proyecto, una estación espacial. Una vez en casa, ¡la caja lo saluda con
entusiasmo! ¡Está viva! Además, comparte con Mateo la pasión por los
inventos y las manualidades, aunque no se le dan especialmente bien… De
hecho, tiende a generar el caos a su alrededor. Cuando las cosas se
complican, ambos deberán adentrarse en el bosque para encontrar al mago
que dio vida a Caja, Tomeo Carabardo, el único que puede ayudarlos a
restaurar la normalidad. Inventos disparatados (como un subeibaja que
resulta ser un «ni-sube-ni-baja» o una máquina de «qué-pasará-ahora»),
hechizos y magia, amistad y aventuras se combinan en esta original
novela gráfica que gracias a su humor, su trepidante ritmo narrativo y
sus ágiles y deliciosas ilustraciones, ha conquistado a miles de niños
en Alemania.